Día 4 : Colina Petrín y Nove Mesto

El cuarto día de estancia en Praga queríamos hacer una ruta desde el monasterio de Strahov y la colina Petrín hasta llegar al barrio de Nove Mesto, para conocer un poco la zona nueva donde estábamos alojados.

Una vez levantados y bien desayunados, empezamos el día cogiendo la línea 22 del tranvía hasta Pohorelec para visitar el Monasterio de Strahov, en Hradcany, que es el más antiguo de Bohemia. Lo más interesante en el monasterio de Strahov es la biblioteca, que tiene dos salas principales: la sala filosófica y la sala teológica. Las dos salas son preciosas y destacan los frescos pintados en el techo.

Una vez en la biblioteca, el acceso al interior de las salas no está permitido, así que hay que conformarse con verlas desde el umbral de la puerta, que es desde donde tomamos las siguientes fotografías:

Praga Monasterio de Strahov sala filosófica
Sala Filosófica
Praga Monasterio de Strahov sala teológica
Sala Teológica
Saliendo del monasterio por la puerta este, justo en frente queda el acceso al Parque Petrín. 

Decidimos pasar la mañana dando un paseo por esta colina, que está llena de caminitos peatonales, hasta llegar a la cima donde se encuentra la torre de observación, que es una réplica de la Torre Eiffel, aunque más pequeña, desde la cual hay unas vistas espectaculares de Praga. 

El Parque Petrín es muy frecuentado por las famílias en Praga, sobretodo en fines de semana, en los alrededores de la torre hay un parque infantil y algunos bares y puestos de comida rápida. 

Se puede subir al observatorio de la Torre Petrín a pie o en ascensor, si como nosotros preferís la primera opcion preparar buen calzado porque hay unos cuantos escalones, casi 300!! Eso sí, una vez arriba, las vistas de la ciudad compensan todo el esfuerzo, por suerte era un día claro y se veía muy bien todo el paisaje. 

Praga torre Petrín
Torre Petrin
Praga panorámica desde la torre Petrín
Vista del Moldava
Praga panorámica desde la torre Petrín castillo de Praga
Vista del Castillo de Praga y la Catedral de San Vito
Cuando bajamos de la torre ya era mediodía, así que decidimos comer unos frankfurts en un puestecito que se encontraba allí mismo, al pie de la Torre Petrín. A mí me parecieron tan buenos y a mi marido tan baratos que nos tomamos dos cada uno! jejeje! 

Después de comer reanudamos la marcha para ir bajando la colina. Hay un funicular con el que se puede subir y bajar sin necesidad de ir a pie, aunque nosotros decidimos darnos un paseo y bajar andando. Tardamos aproximadamente unos 30 - 40 minutos en llegar abajo. Hay que decir que a medida que íbamos descendiendo la colina y nos alejábamos de la cima los caminos eran cada vez más escarpados. 

Una vez en el pie de la colina, cruzamos el Moldava por el puente Legií hasta llegar a Nove Mesto, después bajamos por la orilla del río hasta encontrarnos con el edificio danzante:

Praga casa danzante Frank Gehry
Casa Danzante
Éste es uno de los pocos ejemplos de arquitectura moderna que se pueden apreciar en Praga, el arquitecto del edificio es Frank Gehry. El edificio también se conoce como Fred y Ginger, ya que parece una pareja de bailarines.

El resto de la tarde lo pasamos caminando por el barrio de Nove Mesto para conocer el parque Karlovo Namestí y sus alrededores. Acabamos agotadísimos de andar así que, aprovechando que nos encontrábamos muy cerca del apartamento, decidimos descansar un par de horitas antes de volver a salir por la noche. 

A última hora de la tarde teníamos reservadas entradas para ver un espectáculo de teatro negro en el Ta Fantastica, ubicado muy cerca del Puente de Carlos. La obra que íbamos a ver se llamaba Aspects of Alice, ésta narra el proceso de maduración de Alicia conforme se hace mayor.

Para los que no sepan en qué consiste el teatro negro hay que explicar que no es una representación convencional: la gracia es que todo está a oscuras y parece que las figuras y los actores están volando por el escenario, aunque en realidad es un efecto óptico. 

Praga Ta Fantastika teatro negro
Hall del Ta Fantastika
La obra nos pareció entretenida aunque es cierto que es un poco infantil y una vez ya has visto los efectos ópticos se hace un poco repetitiva. 

Las entradas se pueden comprar en la taquilla del teatro pero también se pueden reservar anticipadamente a través de la página web del Ta Fantastika, aunque la reserva sólo vale hasta un par de horas antes de la función. 

Cuando acabó la función, estuvimos paseando por el puente de Carlos y la Mala Strana. Encontramos de casualidad el restaurante Tri Stoleti, en la calle Misenská, y cenamos estupendamente a base de pato asado con miel, que estaba riquísimo. 

Al salir del restaurante ya era de noche y pudimos disfrutar de estas estupendas vistas del castillo de Praga:

Castillo de Praga panorámica de noche
Castillo de Praga 



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